Os quiero enseñar la tarta que hice a mi cuñado Lucas por su cumple.
Le gustan las tartas con sabores tradicionales y bastante contundentes. Así que me decanté por una con bizcocho de vainilla, mi básico, con buttermilk. Sale muy suave y esponjoso.
Y la crema, que es un descubrimiento para mi, de dulce de leche casero.
Esta buenísima, recuerda a los caramelos de toffee y es bastante fácil de hacer.
Para la crema de dulce de leche se necesita:
1 bote de leche condensada (750 gr)
500 gr de mantequilla
El bote de leche condensada se pone tumbado (quitar la etiqueta previamente) en la olla exprés, se cubre con agua y se cocina 40 minutos con tapa cerrada. El bote de 1 kg necesita cerca de una hora de cocción.
Cuando se enfríe, abrid el bote y probadlo!!! Esta de muerte súbita!!! Ojo, solo probar, no coméroslo entero.))))
La mantequilla a temperatura ambiente se bate como para la buttercream, hasta que blanquee y se hace una crema ligera y esponjosa. Después ir añadiendo dulce de leche y batir.
Puede que cuando terminéis de echar todo el dulce de leche, la crema tenga el aspecto granuloso, cortado. Solo hay que seguir batiendo un buen rato. Se necesita una buena batidora, yo tengo una bastante económica, pero muy eficaz, es una Bosch MUM.
Los bordes están decorados con avellana picada.
Hoy nada de fondant))))
Feliz Cumple, tío Lucas!
Y hoy he vuelto a hacer esta tarta para el cumple de una niña. Os la pongo para enseñar otra manera de decorarla: